
Germán Beardo da su apoyo al equipo Zephysat antes de participar en la fase nacional del Desafío CanSat
El alcalde de El Puerto de Santa María (Cádiz), Germán Beardo, y el concejal de Educación, Enrique Iglesias, han visitado el IES Santo Domingo para trasladar su apoyo y felicitación al alumnado y profesorado que participará en la fase nacional del Desafío CanSat, impulsado por la Agencia Espacial Europea (ESA) los próximos días 13 y 14 de mayo.
Durante la visita, las autoridades municipales han podido conocer de primera mano el proyecto del equipo Zephysat, compuesto por estudiantes de primero y segundo de Bachillerato bajo la coordinación de los docentes Juan Diego Díaz Martínez, Óscar Rodríguez Ocete y Rafael Saldaña Martín, ha indicado el Ayuntamiento de El Puerto en una nota.
Beardo ha expresado "el orgullo" que supone para toda la ciudad contar con un equipo de jóvenes "con este nivel de preparación, creatividad e implicación en proyectos científicos de primer nivel", y les ha deseado "el mayor de los éxitos" en su participación nacional, donde se ha mostrado seguro de que "dejarán a El Puerto y a Andalucía en lo más alto".
El centro portuense ha resultado ganador de la fase autonómica celebrada recientemente en el Aeródromo de Los Alcores (Sevilla), lo que le convierte en representante de Andalucía en esta competición a nivel nacional que tendrá lugar en Galicia.
El grupo ha destacado por "su innovadora misión secundaria", centrada en el muestreo estratificado de partículas de polen. Para ello han diseñado un tambor giratorio que permite recolectar muestras a diferentes alturas durante el descenso del satélite.
El Desafío CanSat, promovido por la Agencia Espacial Europea a través de su Oficina de Recursos Educativos Esero, tiene como objetivo fomentar las vocaciones científicas y tecnológicas entre los jóvenes europeos mediante una experiencia educativa práctica e inspiradora.
El reto consiste en diseñar, construir y lanzar un minisatélite del tamaño de una lata de refresco, en el que el alumnado debe integrar los principales subsistemas de un satélite real: gestión de energía, sensores y comunicaciones. El dispositivo es lanzado a una altitud aproximada de un kilómetro mediante un cohete, desde donde inicia un descenso controlado con un paracaídas, también desarrollado por los propios estudiantes.
Durante esta fase, el satélite realiza mediciones en tiempo real de variables como temperatura, humedad, concentración de CO2 y compuestos orgánicos volátiles, cuyos datos se transmiten a una estación en tierra y se visualizan a través de una interfaz diseñada íntegramente por el equipo participante.